Contaba mi abuela que cuando estaba entrevistando a Doña Rosa para el puesto de cocinera de la casa (familia con un mínimo de diez comensales por comida) se produjo el siguiente diálogo:

Han pasado los años, se han transformado los hábitos, los electrodomésticos, las familias... pero "el pienso" sigue siendo lo más difícil de la cocina.

Así que trataremos de ayudar. La idea es hacer una sugerencia diaria (en edición semanal) para una comida y un postre. Recetas sencillas y que puedan gustar a todos los de la familia. Ya de paso puede servir para organizar las compras del mercado, y así con una vez por semana nos dará para el surtido.

Ah, y hablando de mi abuela.... Ella siempre decía que todos los días hay que hacer sopa, ya sea para servirla como primer plato, ya sea para tomarse un tazón cuando llegamos con frío, pero siempre para que la casa huela a hogar y la cocina se temple.

La otra "constante culinaria": frutas de estación, bien lavadas, secadas con un paño de algodón sin felpa y acomodadas con cariño y buen ojo en el centro de la mesa, además de asegurar el postre, tentamos a la familia a comer una fruta en lugar de un trozo de pan entre comidas.